
Santa Eulalia
IBIZA



RECORRIDO
Localización: Zona Este de la Isla de Ibiza
Punto de partida: Santa Eulalia Punto de llegada: Puerto de Ibiza
Distancia: 9,7 mn (17,96 kilómetros)
Descripción del recorrido:
Se comienza la ruta desde Santa Eulalia, y todo el recorrido discurre por la cara Este de la Isla de Ibiza, descendiendo hacia el sur hasta la propia capital. Siempre cerca de la orilla para poder observar la vegetación y estructuras de la isla, y si es necesario poder parar a descansar fácilmente.
A los 3 km (1,4 mn) de la salida de Santa Eulalia se llega a una pequeña cala, Cala Blanca. Es una Cala muy poco visitada en la Isla.
Recorridos 1, 7 kilómetros más, se llega a Cala Llonga. Una cala que ha sido poblada y es un lugar ideal para ir en familia.
Siguiendo 860 metros más, se podría ver si se baja de la piragua y se asciende por la montaña un yacimiento de la edad del Bronce (Cap des Llibrell).
Tras 1,29 kilómetros del último punto se llega a la Playa Sol d´en Serra. Y avanzando 2,04 kilómetros se alcanza la Punta des Puig Negre.
A los 180 metros se llega a una pequeña cala, Cala Olivera, que puede ser un buen lugar para descansar un rato ya que no acude mucha gente.
Tras 380 metros se llega a Roca Lisa, y 180 metros después se llega a la Cala Espart.
Recorrido 1,30 kilómetros más, la ruta llega a la Punta de S´Estanyol.
El siguiente punto característico es después de 1,10 kilómetros, que se llega a otra cala (Cala Roja).
Siguiendo 2,23 kilómetros más se llega al último punto característico antes del puerto de Ibiza. Este es Talamanca, una cala muy poblada a escasos kilómetros del centro de Ibiza.
Tras los últimos 3,70 kilómetros ya se llega al Puerto de Ibiza, donde finaliza esta etapa y la travesía de 4 días.
Datos culturales:
Cala Blanca
Esta es una cala desconocida, incluso para algunos ibicencos, debido a su difícil acceso por tierra. Se encuentra al este de la isla, entre los pueblos de costa de Santa Eulalia y Cala Llonga. Tiene más de 100 metros de largura con una orilla de rocas en estado “salvaje”, situada bajo un acantilado.
Debido a sus escasas visitas, hoy en día se puede ver en su estado “casi natural”. Esto, es porque las máquinas accedieron a la zona y realizaron un larguísimo túnel de 100 metros bajo la montaña para acceder a la playa. Las obras quedaron paradas, pero el acceso ha quedado como la única vía sencilla para llegar a esta cala poco conocida, aunque la entrada está semi oculta.
Cala Llonga
Cala Llonga está a 5 km de Santa Eulária y es una de sus principales zonas turísticas. Cuenta con múltiples hoteles, transporte público, comercios, bares, restaurantes e instalaciones de ocio para niños. Todos estos servicios se arremolinan en torno a la playa, que, sin embargo, resulta tranquila gracias a la extraordinaria profundidad de su orilla (hasta 100 metros en el tramo más ancho), que la alejan del bullicio del área residencial, y una largura de 200 metros.
La playa es de arena fina y el agua es de color turquesa clara y calmada. El entorno es espectacular, ya que se encuentra protegido por un elevado acantilado en el lado izquierdo que se prolonga hacia el mar, proporcionando la sensación de estar en una ría y por el otro lado se abraza con la pineda. Cuenta con alquiler de hamacas y sombrillas, velomares (patines) y se pueden practicar toda clase de deportes náuticos. Buena parte de los bañistas se alojan o tienen casa en la zona, ya que los montes cercanos albergan algunas urbanizaciones con numerosos residentes extranjeros. Es ideal para familias.
Cap des Llibrell
Cap des Llibrell es un yacimiento que se encuentra en lo alto del monte de Ses Torretes, muy cerca de Cala Llonga.
Fue excavado a finales del siglo XX (1986). Se encontraron restos de un poblado de la Edad del Bronce en un rellano a media altura (viviendas, aljibes…), y en lo más alto parece ser que había un punto de vigilancia de los fenicios por la estructura del yacimiento y las excelentes vistas sobre los alrededores. Desde este punto se pueden ver las islas de Tagomago, Formentera, Puig des Castellar…
Playa Sol d´en Serra
La playa en sí es pequeña y con piedras, una cala abierta a corrientes fuertes, por lo que no es apropiada para niños. Es una playa de relax, en la que tu única preocupación es tirarte en la hamaca y esperar que los camareros te sirvan bebidas. Se trata de una zona de costa muy abrupta y bella, de aguas transparentes, aunque poco idónea para familias con niños, ya que resulta más difícil entrar en el agua.
Los acantilados sobre la playa y el restaurante ofrecen unas vistas panorámicas impresionantes del Mediterráneo y de la costa sur de Ibiza, y en la cala te sientes como si estuvieras en un trocito de cielo solo para ti.
Cala Olivera
Cala de arena en el exterior y arena y piedras en el interior, de 30 metros de longitud y 10 de anchura.
Pequeña y agradable calita virgen, rodeada de bosque y aguas muy transparentes, de color esmeralda, donde suele haber poca gente y algún que otro nudista. Es un enclave ciertamente exclusivo, ya que no suele aparecen en las guías y, al tener que atravesar un control de seguridad, mucha gente desiste. Sin embargo, el acceso está permitido a todo el mundo.
Frente a la cala se ven dos islotes que añaden belleza al entorno. Eso sí, no hay ningún chiringuito. Cerca existe otra playa diminuta, Cala d’Espart, donde también puede bañarse.
Cala roja:
Cala Roja es una bahía de unos 500 metros de costa, una zona de playa virgen.
Amplia zona rocosa con dos puntos donde se puede acceder al mar: justo donde están ubicadas las casetas varadero. Hay unas cuevas muy bonitas que se pueden ver desde tierra. Toda la zona tiene rutas cicloturísticas. Se accede desde Cala Bassa.
Los bañistas pueden acceder al mar desde las casetas varadero que hay situadas próximas a la antigua torre de defensa.
Talamanca:
Es una bahía cerrada, poco profunda y protegida de los vientos. Situada a 2 km de la villa y el puerto de Ibiza hace que tenga una amplia oferta de servicios y líneas regulares de autobuses y barcos.
La playa es de arena fina de origen natural. El fondo es de arena y vegetación submarina. A cierta profundidad, muchos metros hacia dentro, alterna con zonas de roca. La orientación hacia el sureste hace que los vientos dominantes sean de mar a tierra proveniente del sur.
Es una localidad muy turística y llena de encanto. Los ibicencos la conocen como la "playa de Ibiza ciudad", es tan grande que incluso en temporada alta es fácil encontrar sitio.
Más tranquila que la mayoría de los centros turísticos, sin altos edificios de hoteles a la vista, la playa también puede presumir de aguas cristalinas azul turquesa poco profundas, perfectas para un baño relajante.
Ibiza:
Ibiza es la capital de la isla, situada en el mar Mediterráneo y que forma junto a las de Mallorca, Menorca y Formentera y varios islotes de menor tamaño el archipiélago y comunidad autónoma de las Islas Baleares, en España.
Ibiza cuenta con dos zonas especialmente interesantes para los turistas:
-
Dalt Vila
Localizado en la parte alta de la ciudad, el barrio antiguo conocido como Dalt Vila se encuentra rodeado por una muralla construida en el siglo XVI para proteger la ciudad de los piratas y de los otomanos.
Las empinadas calles adoquinadas de Dalt Vila invitan a un tranquilo recorrido en el que las pequeñas casas encaladas se agolpan hasta llegar a la parte más alta, desde donde se obtienen vistas excepcionales. En esta zona se encuentran restaurantes muy agradables.
Dalt Vila cuenta con numerosos lugares de interés entre los que destacan la Catedral de la Virgen de las Nieves (siglo XIII), la Plaza de la Vila, los baluartes de la muralla (desde los que se obtienen interesantes vistas), la Iglesia de Santo Domingo (siglo XVI) y el Ayuntamiento, ubicado en un antiguo Convento Dominico.
El momento más agradable para recorrer Dalt Vila es durante la noche, cuando las temperaturas descienden y el barrio muestra una calma inusitada.
-
Puerto deportivo
La zona del puerto está repleta de bares y restaurantes y las tiendas permanecen abiertas hasta la medianoche, razones que la convierten en una de las zonas más animadas de la isla.
Las terrazas de los bares del puerto son la mejor opción para comenzar una noche de fiesta.
Flora y fauna:
FLORA:
La vegetación de la isla de Ibiza está formada por tres especies típicamente mediterráneas: el pino de alepo, la encina y la garriga mallorquina, monte bajo formado en su gran mayoría por lentisco y acebuche.
La vegetación de Ibiza está muy adaptada a las características climáticas de la isla. En la zona de clima mediterráneo típico predominan las encinas y los pinos. La encina se localiza en áreas húmedas y frescas, donde forma grandes bosques. El pino se extiende por toda la isla y se concentra en lugares más secos. El monte bajo se localiza en las zonas más secas. Se caracteriza por una vegetación poco densa formada en su gran mayoría por lentisco, acebuche, palmito, jara, lavanda y carrizo. En la Serra de Tramuntana, por encima de los 800 m. de altitud, la vegetación está adaptada al clima de montaña. Está formada por tejos, helechos, acebo y especies de alta montaña como el cojinete de monja, que se alterna con la roca desnuda.
En Ibiza las lomas montañosas están cubiertas por claros bosques de pino, encina y sabina, este último es el árbol característico de la isla. El resto de la isla se caracteriza por un monte bajo formado por lentisco, romero, carrizo y adelfas.
Formentera tiene una vegetación muy similar a la de Ibiza aunque con menor número de pinos y encinas.
A continuación las tres especies más abundantes de la isla:
-
SABINA
Juniperus thurifera, la sabina albar, enebra, trabina, tarabina o trabino3 es una especie de la familia Cupresáceas. Crece en un área disjunta en el Mediterráneo occidental, que abarca la parte más continental de los Alpes franceses e italianos, comarcas interiores del centro y el este de la Península Ibérica, algunas montañas de Córcega y el norte de África. Además de estas áreas mayores, está presente en localidades aisladas, como en las cabeceras de los ríos Garona y Arieja en la vertiente norte de Pirineos, en la cabecera del valle del río Noguera Pallaresa y sus afluentes al sur, en la comarca de La Litera en la provincia de Huesca y en el límite entre las provincias de León y Asturias. Esta distribución sugiere un carácter relíctico, restos de una distribución más amplia en tiempos geológicos pasados.
-
PINO DE ALEPO
Pinus halepensis (pino de Alepo o pino carrasco) es una especie arbórea de la familia de las pináceas, Pinus Es un árbol originario de la región mediterránea, tanto norteña como del sur. El nombre científico de la especie proviene del nombre de la ciudad siria de Alepo.
Puede alcanzar los 25 m de altura. El tronco es macizo y tortuoso, de corteza gris rojiza y copa irregular. Estróbilos rojizos de forma oval de unos 10 cm de longitud. Acículas largas agrupadas de dos en dos, muy flexibles y ligeramente amarillentas. Piñas pequeñas y pedunculadas. Es muy resistente a la aridez, las ramas y la corteza son grisáceas. Las hojas tienen de 0,7 a 1 mm de anchura y de 3,5 a 7 cm de longitud y son de un verde amarillento. Florece en abril o en mayo y hace muchas piñas de 5 a 12 cm de longitud.
-
GARRIGA
La garriga es un tipo de ecorregión compuesta por formaciones vegetales que surgen en los biomas de los bosques mediterráneos.
Estas formaciones son el resultado de la degradación del chaparral y otras comunidades vegetales como bosques de quercineas provocadas por la acción del hombre: el sobrepastoreo y el fuego. Es un hábitat degradado que en ocasiones sustituye a los encinares y otros robledales quemados o talados.
La garriga designa formaciones mediterráneas con una cubierta importante de matorral altos y bajos, más o menos difícil de penetrar, y caracterizados por la presencia de arbustos de escasa altura, y plantas adaptadas a la sequía. La cobertura puede ser densa, y cerrada o abierta, con manchas de terreno desnudo, propia de suelos calizos. Esta formación es el resultado de la degradación o regresión de formaciones más complejas como el chaparral o los bosques de Quercus, debido a la actividad del hombre durante miles de años: ganado, (vacas, cabras y ovejas, por ejemplo)
Ibiza concentra la mayor diversidad en su medio marino, en el que encontrarás más de 400 especies de peces, centenares de crustáceos e invertebrados y
aves marinas, entre las que destaca la especie endémica de la pardela balear.
Pero la joya de la corona de nuestro fondo marino es sin duda la Posidonia oceanica,
planta marina que forma unas praderas que sirven de refugio y alimento a
muchísimas especies, además de oxigenar y limpiar las aguas siendo responsable
del color cristalino tan característico de las aguas de las islas.
La especie más abundante en sus fondos marinos:
Posidonia oceanica:
Es una planta acuática, endémica del Mediterráneo, perteneciente a la
familia Posidoniaceae. Tiene características
similares a las plantas terrestres, como raíces, tallo rizomatoso y hojas cintiformes de
hasta un metro de largo dispuestas en matas de 6 a 7. Florece en otoño y
produce en primavera frutos flotantes
conocidos vulgarmente como olivas de mar.
Forma praderas submarinas que tienen
una notable importancia ecológica. Constituye la comunidad clímax del mar
Mediterráneo y ejerce una considerable labor en la protección de la línea de
costa de la erosión. Dentro de ellas viven
muchos organismos animales y vegetales que encuentran en
las praderas alimento y protección. Se la considera un buen bioindicador de la calidad de
las aguas marinas costeras.
FAUNA:
En cuanto a fauna se refiere las islas cuentan con más de 300 especies endémicas, la mayoría de ellas insectos, moluscos terrestres (caracoles) y otros invertebrados. Pero si algo caracteriza nuestras islas son las lagartijas, como la lagartija balear y la pitiusa. Otras de las especies endémicas más destacadas es el ferreret o sapillo balear, casi un fósil viviente que habita en los torrentes de la Sierra de Tramuntana y que representa todo un símbolo en Las Baleares.
Entre las aves endémicas, además de la pardela balear destacan especies como la curruca balear y subespecies como el reyezuelo o el herrero común. Y en cuanto a mamíferos endémicos, el lirón careto de Formentera es el protagonista.
No hay que olvidar que más allá de los endemismos, las zonas húmedas y salobrales de las islas son un hábitat clave para aves migratorias, flamencos o especies como el águila, acuden a estas ricas áreas a descansar y anidar. En definitiva, en las Islas Baleares encontrarás una riqueza natural que te sorprenderá.
SALAMANQUESA
La salamanquesa es el reptil más conocido y abundante en Mallorca, menorca e Ibiza. Se refugia en paredes, grietas de casas, árboles etc. Sale de noche a cazar escarabajos, tijeretas, cochinillas y otros insectos que detecta con la vista, engulle y no digiere hasta la mañana siguiente cuando sale de su refugio a calentarse. Permanece aletargado desde octubre hasta marzo, pues, como los demás reptiles constante su temperatura. En primavera, durante el celo es muy territorial, pone sólo dos huevos y las crias nacen a los tres meses
La curruca balear es una especie de ave del archipiélago español de las islas Baleares. Anteriormente se consideraba una subespecie de la curruca sarda (Sylvia sarda), y aunque en la actualidad generalmente se consideran especies separadas algunos taxónomos continúan considerando que sus diferencias son insuficientes para considerarlas especies diferentes.
Reyezuelo Sencillo (Regulus regulus) es el ave paseriforme más pequeña de Europa: mide 9 cm de longitud y 14 cm de envergadura, pesando entre 5 y 6 g. Suele verse en las ramas bajas de los árboles, en las que come; se le reconoce por su tono marrón verdoso, con una banda negra con centro amarillo en la coronilla.
Su reclamo es silbante, muy insistente; el canto, muy agudo, rápido y modulado, con florituras terminales.
Su nido, en forma de taza pequeña, es de musgo y líquenes; pone siete u ocho huevos en dos nidadas, de abril a julio.
Impacto medio-ambiental:
El impacto medioambiental que se observa desde el mar durante la ruta son los pueblos, urbanizaciones, chiringuitos… Esto afecta al paisaje, la vegetación, la fauna y los residuos que se tiran al mar.
Sobre todo, el mayor impacto se encuentra en la ciudad de Ibiza debido a su turismo de festividad e infraestructura.
Observaciones:
Es una etapa muy bonita, en la que se pasa por muchas calas y algunas de ellas vírgenes. Aunque, si se quiere hacer en una mañana es un tramo duro de bastante distancia y no te permite parar durante largos periodos.












